CARTAS DE SANGRE /LA HISTORIA JAMAS CONTADA DE LIN

El Partido Comunista Chino no ha parado, desde que se alzó con el poder, de perseguir al cristianismo. Ahora, y a pesar de los acuerdos, parece que la persecución se ha recrudecido. En este sentido, hay que dar la bienvenida a libros como este, que hacen hincapié en héroes desconocidos que, por compromiso con la fe que habían descubierto, se enfrentaron al régimen. Es el caso de Lin Zhao, periodista y poetisa china, cuya historia conmueve a cualquiera que se acerque a ella.
Educada en escuelas misionales, Zhao se inscribió de joven en el partido comunista y sirvió durante mucho tiempo a la causa de la revolución. Estudió periodismo en la universidad, dispuesta a convertirse en una auténtica escritora revolucionaria. Pero su experiencia práctica pronto ayudó a que abriera los ojos. Así, en la universidad, fue consciente de cómo actuaba la política de depuraciones y traiciones. Muchos conocidos suyos “desaparecieron” acusados de derechistas, cuando criticaban la falta de apertura del régimen de Mao. Ella también comenzó a ser sospechosa.
Unos años después fue cuando la situación se puso seria. Finalmente, fue acusada de ejercer el liderazgo contrarrevolucionario. Unos años antes, había salido un periódico clandestino que revelaba la hambruna sufrida por el país y criticaba a Mao. Así, fue condenada a prisión. Durante el tiempo que estuvo presa, Zhao escribió muchos documentos y cartas, con su propia sangre, en los que no cejó en su empeño de criticar a Mao.
Se decretó su condena a muerte cuando la joven china se negó a someterse a la “reforma del pensamiento”. Pero destaca sobre todo su compromiso con la fe, como señala el autor, que compara su oposición al totalitarismo con otras figuras, como Sophie Scholl o D. Bonhoeffer. “Su fe religiosa tuvo su papel en las heroicas luchas de estos individuos”, escribe.
Un libro conmovedor que pone de manifiesto la importancia de la fe en el momento de la persecución.

TROA