CLARA Y LAS ABUELAS CANGURO

Tania Krätschmar, berlinesa de nacimiento, se ha destacado como autora dentro del género feel-good con Clara y las abuelas canguro. Este tipo de novelas que promueven la felicidad se presentan como el último reclamo editorial. No es una gran obra de literatura, no es un libro que haga pensar mucho, pero al fin y al cabo se nota cierto aliento optimista, que es lo que en realidad persigue la historia.
Clara ronda ya la mediana edad. Aunque felizmente casada, su vida empieza a encarrilarse por una vía sin muchas expectativas profesionales y que no le satisface en absoluto. Tras una breve conversación con su madre decide dar un giro a su carrera profesional y crea una agencia de au-pairs para mujeres mayores de cincuenta años. Karen, recientemente jubilada y divorciada desde hace años; Suse, divorciada y cocinera del restaurante que comparte con su insoportable hermano; y Hanni, viuda con una vida de color gris, serán sus primeras contratadas. Venidas de ciudades alejadas de la capital, su primer empleo las llevará a Berlín. Todo para ellas allí será nuevo. Enseguida se darán cuenta que tienen por delante todo un mundo por descubrir y situaciones que experimentar. No sólo intentarán desarrollar su trabajo lo mejor posible, sino que será la ocasión de dar un giro a sus vidas.
Siguiendo el género feel-good, la autora busca un final feliz y aborda valores y actitudes positivas. Sin un planteamiento ético sólido, a veces de manera frívola, se ponen en valor la solidaridad, la empatía, el amor y la amistad.

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