COLOR VERDE LADRÓN

Primer episodio de una serie de novelas policíacas infantiles protagonizada por una pandilla de amigos, Manu, Erika, Carol y Alex que han adoptado el nombre de La Lupa para su actividad como detectives. La acción transcurre a lo largo de una semana de abril, que se inicia con el cumpleaños de Erika que se celebra el lunes y se cierra el viernes con el de Lucía, la hermana mayor de Manu.
Erika ha pedido a sus amigos que le regalen cosas hechas por ellos pero a pesar de eso recibe de uno de ellos un collar, evidentemente comprado en una tienda y que por eso no ha sido un regalo muy apreciado. Por la noche cuando los invitados se han ido y la protagonista de la fiesta va a guardar todos los que le han hecho, se da cuenta de que el collar ha desaparecido y por más que lo busca no consigue encontrarlo. La acción que se desarrolla a través de las entradas de los diarios de los cuatro miembros de La Lupa, narra las investigaciones conjuntas llevadas a cabo por todos ellos para encontrar pistas que les orienten sobre lo que ya se considera no una pérdida accidental sino un claro caso de robo. Erika sospecha sobre todo de Jaime, su hermano mayor, pero no puede probar nada y los demás comienzan pensar que el culpable debe ser uno de ellos mismos. Cuando el viernes, el collar aparece entre los regalos que ha recibido Lucía y que ella ha expuesto en la mesa del salón, los hechos se precipitan hasta llegar a un desenlace sorprendente. La historia, técnicamente bien resuelta, plantea las relaciones de amistad de los aprendices de detectives como eje de la trama antes que la resolución del caso que les ocupa y concede primordial importancia a su firmeza, hasta el punto de que las sospechas no la afecten, ni tampoco descubrir lo que en realidad ha ocurrido. Escrita con estilo sencillo, de frases cortas su lectura resulta entretenida y su contenido refleja unas situaciones familiares estables en todos los miembros de la pandilla.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa