COMPLETAMENTE CLEMENTINA

El séptimo episodio de las aventuras de Clementina, una niña que poco a poco se va haciendo mayor, está dedicado a contar la expectación que despierta la llegada de un nuevo bebé a una familia numerosa. A esta cuestión primordial se añade otra, no menos importante, relativa al enfado de la protagonista con su padre porque no es vegetariano como ella. Para liberarse del agitado ambiente de espera que reina en su casa, el padre de su mejor amiga, Marga, la invita a pasar con los dos un fin de semana en un hotel de lujo. Estos acontecimientos desacostumbrados, a los que se une el hecho de que la madre de Marga va a volver casarse, hacen que Clementina descubra aspectos del mundo adulto que suponen para ella un cierto crecimiento interior al obligarla a reflexionar sobre asuntos en los que antes no había reparado. El relato expone con estilo sencillo, bien redactado pero poco elaborado desde el punto de vista literario, una serie de cuestiones interesantes sobre la relación entre padres e hijos y la necesidad de aceptar, por ambas partes, que no siempre una tiene que adoptar como propios los gustos y opiniones de la otra. En general los episodios narrados responden a un esquema convencional carente de mayor interés y que, tal vez debido a la falta de rasgos de humor, impide que la acción resulte divertida. El ambiente hogareño de la protagonista es cálido, al revés de lo que ocurre con su amiga Marga, pero se aprecia en los padres cierta banalidad en su modo de entender las relaciones entre los distintos miembros de la familia.

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