CON RUEDAS Y A LO LOCO

Daniel Stix, protagonista de un anuncio de Cola-Cao, parapléjico, nació con cáncer y pasó sus primeros 18 meses de vida sometido a sesiones de quimioterapia. Es hijo de madre española y padre americano y el segundo de tres hermanos. Una autobiografía, que nos muestra el optimismo con el que vive su día a día, sus ganas de comerse el mundo y de ser buena persona. No se identifica con la palabra adversidad, pero sí con otras como desafío. Para él la discapacidad no es un desastre. Explica como la clave de todo la tienen sus padres que nunca han visto sus problemas físicos como una desgracia y que no han hecho distinciones entre sus hijos: les han dado la caña y no el pescado. Igualmente sus profesores, sus maestros en la competición deportiva y amigos que han sabido ayudarle de forma amable y cariñosa. El deporte ha estado siempre presente en su vida, lo ha identificado como su pasión; es lo que más le motiva, más le mueve y le apasiona porque en su práctica ha conocido los valores que más le importan y que le ayudan a ser feliz. También relata las vicisitudes para encontrar colegio, sus viajes a Nueva York para ver a la familia y la relación con su entorno. El libro rebosa vitalidad, alegría y agradecimiento. Su sueño es llegar a la Universidad y poder participar en los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro 2016. Ha sido, el jugador más joven de la historia en disputar la Champions Cup de Baloncesto en silla de ruedas y subcampeón de Europa con el Fundosa ONCE.

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