DESEAR MENOS

Cada vez hay más libros que tratan del minimalismo, lo que muestra el agotamiento del sujeto contemporáneo. Eso es bueno porque permite sondear el camino que lleva al hombre del tener al ser. Se calcula que cada hogar americano tiene más de 300.000 objetos. Pero Chayka cree que esa obsesión acumuladora se extiende a otros ámbitos: las emociones, la información, la conexión constante. En un libro que está a medio camino entre la autoayuda y el ensayo filosófico, esta autora combina la reflexión, las anécdotas, las historias personales y los datos empíricos para proponer un cambio de vida radical.
Asimismo, Chayka expone la influencia del minimalismo y cómo se ha encarnado en la música o la arquitectura. La tendencia en el arte es a volverse hacia formas más limpias, estimulando el silencio y la contemplación. Chayka se refiere a su propia experiencia y viaje hacia el minimalismo. Con alguna reserva, el libro pone el acento en la necesidad de parar y de volverse a lo interior, frente a tanta estimulación y vibración externa.

TROA