DIARIO DE UN ASESINO MELANCOLICO

La novela comienza con una declaración sorprendente: “Una mujer me dio la vida. Una mujer, me temo, ha de quitármela” La mujer que el protagonista supone que va a quitarle la vida es su propia esposa, con la que lleva casado más de 30 años.En un largo soliloquio, que nos hacen pensar en su soledad, describe a su mujer con su trabajo como médico, su perfeccionismo, que la hace maniática de la limpieza y el orden, y con su modo de echarle en cara las cosas que no son de su agrado. Presa de una verdadera obsesión, va explicando cómo su mujer lo va desgastando, con la intención de matarlo. Pero pese al título “Diario de un asesino melancólico”, y pese a que el protagonista está convencido de que su mujer quiere matarlo, la narración no llega a ser macabra porque mantiene un tono humorístico, sarcástico en ocasiones pero nunca trágico. Por eso la novela se lee sin sufrimiento. Está escrita con una prosa clara, la narración tiene ritmo y amenidad. Detalla en exceso las descripciones de la vida sexual del protagonista.
Francisco López Serrano (Epila, Zaragoza, 1960) es escritor y traductor. Ha publicado varios libros de poesías y novelas como “El país de la lluvia" (2004), "Retrato del asesino en prácticas" (2005), "El Prado de los Milagros" (2008), "El tiempo imaginario" (2014) y "Los Misterios" (2015), Por “Diario de un Asesino melancólico” merecidoel XX Premio de novela Ciudad de Salamanca, y ha obtenido otros por las anteriores.

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