DIDI KEIDY SE DISFRAZA

En el cuarto episodio de la serie que protagoniza Didi, una niña con poderes de bruja, no quiere disfrazarse en la fiesta de Halloween. Sin embargo cambia de opinión al saber que una compañera de clase muy antipática e impertinente va a ponerse precisamente un disfraz de bruja. En ese momento a ella se le ocurre ponerse un vestido parecido a los que esta lleva, siempre un poco cursis y hacerse, por medio de un conjuro, con un color de pelo y un peinado semejante a los suyo. A la interesa no le hace ninguna gracia la broma, sobre todo porque Didi no sólo le copia su aspecto sino que también imita su comportamiento despectivo y altanero. Esta actitud llega a ser tan llamativa que molesta incluso a sus mejores amigos, Lucy y Bruno. La situación va demasiado lejos y el director del colegio interviene para hacer comprender a Didi cómo se siente su compañera y recomendarle que le pida perdón por haberla puesto en evidencia de forma excesiva. El cuento, escrito con estilo amable, sencillo y suavemente humorístico, es de grata lectura y su contenido encierra un mensaje educativo bien orientado, sobre cómo comportarse con los amigos y con quienes no es fácil que lleguen a serlo. La presentación editorial y las numerosas ilustraciones resultan muy acertadas.

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