EL ARTE DE LA GUERRA

Sun Tzu que vivió en China en el siglo V a.C. recogió en trece capítulos sus enseñanzas sobre el arte de hacer la guerra, basadas en la experiencia que obtuvo en su vida como general al servicio de distintos señores feudales de su país. Esta edición incluye junto a los pensamientos originales del autor una serie de comentarios introducidos en épocas posteriores por discípulos y compatriotas suyos. Cuenta además el volumen con una introducción muy amplia realizada por el mismo general inglés que tradujo el original chino en la que se describen los rasgos fundamentales del autor, el texto y lo época a que ambos responden y se comparan las técnicas de Sun Tzu con las empleadas por Mao-Tse-Tung en su ejército rojo.
Cada capítulo, está dedicado a un tema distinto: maniobra, terrenos, marchas, agentes secretos, etc., y se estructura a base de pensamientos numerados en los que se revela una brillante estrategia y un gran conocimiento de la psicología de masas. Sabiduría y sentido común se reúnen en este tratado que se consideró clásico en su país y cuyo conocimiento no llegó a Europa hasta el siglo pasado y de forma muy restringida. La obra impresiona, incluso a un lector profano, por su férreo concepto de la disciplina y la sutileza en el manejo de las tropas dentro, como es lógico, de los esquemas de la guerra convencional. Los comentarios de los discípulos de Sun Tzu, aunque no aportan novedades en cuanto a ideas ilustran con pequeñas anécdotas que además de ser muy expresivas y aclaradoras, dan más agilidad a la lectura. La traducción argentina presenta algunos términos y giros ajenos al uso peninsular.
La obra, en una perspectiva de más de dos mil años, muestra cómo las ideas militares perduran a través de los siglos tanto en lo téctico como en las motivaciones que impulsan a la lucha. Sun Tzu comienza la obra afirmando "La guerra es asunto de vital importancia para el Estado". A partir de ahí no intenta glorificarla sino llevarla a cabo con criterios prácticos y de eficacia efectiva. Su postura no es de triunfalismo militarista sino la lógica en un profesional de la guerra que vive en una época de intensa actividad bélica.

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