EL CHICO QUE NADABA CON LAS PIRAÑAS

El protagonista de esta historia es un niño huérfano que vive con su tío Ernie y su mujer, tía Annie. Su vida tranquila y ordenada, en una población costera inglesa, se ve radicalmente transformada cuando los astilleros que dan trabajo a la mayoría de sus habitantes cierran y el tío Ernie queda sin trabajo. Decidido a superar esta situación, monta una pequeña fábrica de conservas y obliga a Stan a trabajar con él durante todo el día. El creciente éxito de su fábrica le lleva a incrementar la producción y a forzar a Stan a prescindir de la escuela y de los juegos propios de su edad. Harto de ser explotado, Stan se escapa de casa y se ocupa de ayudar a un feriante en una atracción dedicada a la pesca de patitos de plástico. Con él y su hija, una niña de edad parecida a la suya, Stan conoce el mundo de las ferias ambulantes, más animado que la fábrica de su tío, quien acaba de perder su negocio y ha sido desahuciado de su vivienda por razones que no quedan muy claras. En el recinto de la feria, Stan conoce un singular personaje cuya habilidad consiste en bañarse en una piscina llena de pirañas sin sufrir ningún daño. Stan acaba compartiendo su tiempo entre la pesca de patos y los baños en el estanque de estos agresivos peces que a su lado se vuelven mansos e incluso acoge a sus tíos, que no tienen donde vivir. El autor refleja en el personaje central la soledad de los niños indefensos ante la falta de cariño de sus cuidadores. El desenlace resulta esperanzador pero tanto la concepción estructural de la trama como su desarrollo resultan un tanto sombríos, en función del propósito aleccionador que encierran. La influencia de elementos extraliterarios, impregna a la obra de un carácter reflexivo e incluso filosófico, que resulta inadecuado para la mentalidad del público al que va dirigida aunque concluya con la nota amable de afirmar que Stan y sus amigos merecen tener motivos para estar contentos porque son buenos y honrados. La ambientación y los personajes tienden a presentar rasgos extravagantes pero el estilo en cambio es de fácil lectura.

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