EL DEVORADOR DE LIBROS

El devorador de libros es la última novela de la escritora catalana Pepa Mayo. Con apenas 12 años, George es un fanático de los libros. Vive siempre que puede encerrado en casa leyendo. Su familia, preocupada porque apenas sale de casa ni tiene amigos, le anima a conocer a su joven vecina, Briana. Aunque el comienzo de su amistad resulta un poco forzado, enseguida los dos hacen buenas migas. El primer plan que organizan juntos será la visita a la Exposición Universal de la ciudad de Londres donde conocerán al “devorador de libros”, un extraño personaje que les propondrá un juego a base de pistas para poder obtener un artilugio mecánico jamás visto antes: un robot que funciona con gran autonomía y que supone una auténtica revolución para los tiempos en los que está situada la historia. El reto llevará a los protagonistas a través de obras de literatura inglesa a diferentes lugares para ir avanzando en la aventura: un cementerio, una librería regentada por una bruja, personajes misteriosos de un circo. El final del camino, la meta del juego, coincide sorprendentemente con el cumpleaños de George y en un acto celebrado en el Palacio de Cristal con cientos de invitados especiales, incluida la Reina, el niño se verá agasajado de una manera que jamás hubiera podido imaginar.

Pepa Mayo propone un libro de aventuras articulado a través de pistas relacionadas con obras de literatura en un ambiente burgués anglosajón. Los personajes son dos señoritos educados e inquietos intelectualmente, como se puede apreciar en las ilustraciones firmadas por el prestigioso dibujante Gervasio Cabrera. La acción está bien ambientada en el Londres del siglo XIX pero resulta curiosa la selección de las obras de la que se sirve la autora para ir engranando el juego que protagonizan los personajes. Por lo general no son las más conocidas o al menos no las que a priori encajarían con el público al que va dirigido al libro. Además, los temas resultan un tanto escabrosos y oscurantistas: cementerios, brujas, pócimas, encantamientos.

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