EL HOMBRE DEL RÍO

Novela póstuma del conocido periodista y escritor español, que ha publicado con éxito múltiples libros de viajes.
Ya nos contó su viaje por el Amazonas donde casi pierde la vida, y dice deber este relato a Francisco Orellana, que recorrió el gran río hasta el Océano con éxito, tras múltiples dificultades.
No es un relato de viajes sino una mezcla entre viaje y novela, con la aparición de personajes ficticios.
Francisco Orellana, extremeño de Trujillo, tierra de conquistadores como los Pizarro, de origen humilde, siente -como otros hombres de su época- la llamada de América, y las posibilidades de honor, gloria y oro. Consigue lo primero. El honor y la gloria, pero pierde el oro porque lo reinvierte para repetir su hazaña y volver al Amazonas.
Va de Trujillo a Sevilla, allí embarca como grumete y pronto su posición en la nave mejora porque sabe leer y escribir.
Tras varias aventuras se adentra con uno de los hermanos Pizarro en una zona desconocida de la selva ecuatoriana, y, cuando están al límite, en lugar de volver a reabastecer a todos, junto y de acuerdo con su tripulación continúa río abajo, mientras Pizarro debe volver a Quito. Todos pasan terribles penalidades.
La novela destaca el carácter de líder de Orellana que hace que sus compañeros le sigan a pesar de las dificultades, los enfrentamientos, la ausencia de vituallas y la pérdida de vidas por enfermedades o muertes violentas.
Francisco Orellana regresa a España, recibe el reconocimiento como Adelantado, recibe el oro y lo emplea en preparar una nueva expedición, a su costa, en la que pierde también la vida, muy joven y acompañado por su reciente esposa.
La novela está hábilmente narrada y se lee muy bien.

Carmen Trigo