EL NACIMIENTO

Una mujer que no lograba quedarse embarazada, descubre que al fin lo está. Por una parte se describen sus sensaciones físicas y sentimientos, todo lo que ocurre en su cuerpo y cómo siente el movimiento del feto; por otra parte se muestran los sentimientos de su marido. Ambos viven fríamente, respetándose pero sin amor. Las dificultades del embarazo y un parto prematuro hacen que el padre del niño cambie profundamente. El relato indaga en todas las fases de los pensamientos de odio, culpa, miedo, hastío, sufrimiento, que padece cada uno por el otro, por sí mismo y por su hijo.
En el relato apenas hay diálogos, sino una aguda, penetrante y acertada introspección psicológica en los padres del niño, que no es agobiante ni tortuosa, sino expresión de la dureza de la vida, del egoísmo, del amor y de la transformación profunda que produce un hijo en un matrimonio que parecía insalvable. El libro es emotivo, intenso en los sentimientos, lleno de una sinceridad que puede resultar dura pero es muy real, y nunca, a pesar de su ternura, empalagoso. Aunque el matrimonio vive en Moscú, podría tratarse de cualquier lugar del mundo, pues los problemas por los que atraviesan los protagonistas son bastante comunes hoy en día. El lector acompaña a la mujer y al marido en su zozobra, en su angustia, y se emociona con ellos. La capacidad literaria del autor no es desdeñable y está al servicio de una buena historia bien contada, sin alardes, pero sin rebajar su alta calidad.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa