EL NOVIEMBRE DE KATE

Mónica Gutiérrez, nacida en Barcelona y residente en esa ciudad, cosechó buenas críticas con su segunda novela, Un hotel en ninguna parte, con la que consiguió entrar en la lista de los libros más vendidos.
Kate vive en Coleridge. A pesar de haber estudiado periodismo sus días trascurren detrás de la mesa de un despacho como secretaria de un malhumorado jefe en una importante auditoría. Sola en la pequeña ciudad tras terminar una relación amorosa que le ha llevado a la desconfianza para crear lazos, y el traslado de sus padres a la Costa Brava donde vive su exitosa hermana mayor, a Kate no le queda más esparcimiento que las visitas a un recóndito bar donde trabaja como camarero su amigo Pierre, la colaboración en una emisora local con escasos oyentes y ningún recurso, y los ratos a solas que pasa en el indómito jardín de su destartalado edificio. Pero algo podría hacerle girar como una peonza y conseguir que saliera de su anodina vida. Es noviembre y una gran tormenta se aproxima. El encierro obligatorio en las casas impuesto por las autoridades competentes podría conseguir que Kate descubriera de nuevo las cosas hermosas de lo cotidiano. Quizá el artífice de la trasformación sea Don, un policía informático, cliente habitual de Pierre, y que no tiene más objetivo que vengar la muerte de su amigo Gabriel.
La autora da vida a unos personajes cercanos y creíbles en los que predominan valores como la amistad, la lealtad, el respeto mutuo o la generosidad. Se toma en cuenta la opinión del otro y se le da credibilidad basándose en el amor desinteresado paterno-filial, fraterno o de amistad.
Ante las dudas en el modo de obrar no se justificarán los medios ilegítimos para conseguir un fin bueno. Toma relevancia el actuar con recta conciencia.
La alternancia de los protagonistas como narradores de la historia con su propio punto de vista da agilidad a la novela. El fino sentido del humor en algunos diálogos hace más cercanos a los personajes y la lectura agradable.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa