EL PEQUEÑO GUARDIA ROJO

Relato autobiográfico donde el autor, nacido en una pequeña población al noroeste de China en 1965, cuenta sus años de infancia, todavía en época de la dictadura de Mao. Fallecido este en 1976, su adolescencia y primera juventud correspondieron a los inicios de cambio político y social en su país, con una mayor libertad, siempre dentro de esquemas de la dictadura comunista, y cierta mejora en la situación económica.
La obra se ciñe, de forma casi exclusiva, al ambiente familiar del narrador en cuyo hogar convivían cuatro hermanos, los padres y la abuela materna. Los problemas políticos del padre, miembro del partido comunista chino y siempre en peligro de caer en desgracia, las exigencias que el devoto cuidado de la abuela impone y la actitud negativa de esta ante la madre, sirven para poner de manifiesto las dificultades de la población durante el final de la etapa maoísta. El espíritu tradicionalista confuciano de la abuela angustia al padre, quien teme la causa problemas y por la misma razón irrita a la madre, que no desea llamar la atención de las autoridades. El protagonista reconoce sentirse arrepentido de haberse evadido de estos problemas, yendo a estudiar a Shangai primero y emigrando a Estados Unidos después. Lo más destacado de esta evocación costumbrista y afectiva es la forma en que refleja la tensión de los padres por miedo a denuncias y privaciones. La abuela, en cambio, no llega a percibir la realidad en que vive y los jóvenes conocen ya una etapa más distendida. El autor, que trabaja como escritor, periodista y traductor, describe con viveza su descubrimiento de Occidente, sobre el que en China sólo le habían dado informaciones falsas, y su aprecio por la libertad que allí se respira. Sin embargo, quizá por la educación recibida en la infancia, sólo valora los aspectos materiales de su cultura, sin atender al trasfondo espiritual que en ella subyace.

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