EL POLÍMATA

Se llama “polímata” a aquella persona que no destaca en un campo, sino en muchos. O en todos. Dicho de otra manera: un polímata es lo contrario de lo que hoy, en un mundo que tiende a la especialización, se estila. A lo largo de la historia, han existido muchos: desde Aristóteles a Susan Sontang. Peter Burker traza un recorrido por los más señeros, hombres y mujeres de todos los tiempos que no se limitaron a sobresalir en solo un ámbito porque en ellos el amor al saber era tan amplio y tan ardiente que les obligaba a interesarse por lo que salía a su encuentro.
La obra, sin embargo, no se circunscribe a acercar esas figuras señeras. Lo que hace interesante estas páginas es tanto el estilo de Burke como las anécdotas que cuenta, pero además interesa su explicación de por qué cada día hay menos -y no más- sabios. Según el conocido historiador, la Modernidad vio, gracias a la difusión del conocimiento, un aumento de polímatas, para después, tras la exigencia de especialización, decaer. Con muy buena intención, Burke además ofrece una lista de 500 polímatas: en ella hay algunos cuya presencia se puede cuestionar y también ausencias notables. No faltan, sin embargo, españoles entre los personajes principales.
Aunque no se trata de un libro de autoayuda, el lector puede encontrar estímulos para mejorar en su propia vida intelectual. Quizá suene un poco ambicioso pretender que todos lleguemos a ser polímatas, como se puede sugerir, pero Burke hace bien en contribuir al crecimiento de cada uno.
Un libro que interesará a los apasionados de la historia, a las personas de amplia cultura y a los amantes de las biografías.

TROA