KERIDA AZUBÁ

El dueño de la tienda de un pequeño pueblo es un hombre triste que todos los días envía una carta a la misma persona pero nunca recibe respuesta. El hijo del cartero y su mejor amiga, la niña del ingeniero, averiguan que la destinataria es una mujer que vive en Haifa (Israel) y deciden escribirle como si ella le contestara para ver si así está más alegre. Cuando los padres respectivos descubren el engaño, se pone de manifiesto que el tendero ya sabía que no era Azubá quien contestaba pero que, aún así, los niños han conseguido devolverle la sonrisa. La obra, plantea, con acierto, el tema de la soledad y la tristeza de un emigrante que no se siente acogido en su nuevo país y la necesidad que siente de que alguien se interese por él. Bien escrita, ha quedado finalista del premio Barco de Vapor en 2012.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa