LA COCINERA

La novela arranca en 1771, en el momento en el que la joven Constança Clavé se ve obligada a dejar la lejana ciudad de Lima tras la muerte de su padre, un diplomático al servicio del virrey Manuel de Amat. Inicia entonces un largo periplo a bordo de La Imposible, nave de la Real Compañía de Comercio de Barcelona, para reunirse con sus abuelos. Viaja con su única herencia: el cuaderno de recetas de quien fue su primer maestro en la corte peruana, el chef Antoine Champel. En Barcelona sueña con ser una gran cocinera y luchará por conseguirlo.
Coia Valls ofrece una imagen cercana de la protagonista, una joven que aprende, durante su largo periplo, a equilibrar las alegrías con sus problemas y los éxitos con sus fracasos y que nos enseña que los grandes retos no se pueden alcanzar sin tener en cuenta que los aprendizajes de nuestro pasado hay que ponerlos en valor para el futuro. Constança Clavé posee valores como la superación, el esfuerzo, la constancia, la curiosidad, las ganas de luchar por conseguir lo que se propone…. Y, además, tiene la capacidad de aprender de todo lo que tiene a su alrededor: la naturaleza, las cosas que ve y escucha. A lo largo de su trayectoria también descubre el amor explicitado en referencias eróticas de diversa índole.
Como novela histórica no sólo hay personajes de ficción mezclados con los personajes históricos (como el propio virrey Amat o el barón de Maldà) sino que también recorre acontecimientos de aquella época como la revuelta de las quintas de mayo de 1773, el incendio que destruyó el edificio donde estaban instalados los servicios de la aduana, la construcción la Lonja de Comercio o la plantación de los olmos en la Rambla. Realidades.
La novela está estructurada en cinco partes precedidas, cada una de ellas, por una cita introductoria. Cada una consta de siete capítulos que van marcando el ritmo narrativo. La acción se desenvuelve de forma ágil a base de estos siete capítulos breves y bien trabados entre sí y al fluido desarrollo argumental. Emplea un estilo ligero, ameno y fluido y un lenguaje cuidado y bien adaptado al momento histórico. Las referencias culturales y los modos de vida de distintos estratos de la sociedad de entonces le aportan profundidad y credibilidad al relato que, además de bien narrado, resulta entretenido. La novela descubre que algunas de las comidas que hoy consideramos arriesgadas y de rabiosa actualidad tienen sus raíces siglos atrás y que el mundo de la alta cocina sigue dominado por hombres.
La cocinera es una novela histórica de la escritora y también actriz, Coia Valls (Reus, 1960).

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