LA LEYENDA NEGRA

Julián Juderías (1877-1918) intérprete de lenguas en el ministerio de Estado, y funcionario de la Secretaría del rey, expone en esta obra, escrita en 1915, una serie de reflexiones históricas dedicadas al tema de la Leyenda Negra antiespañola, en sus puntos principales de ataque: Felipe II, la Inquisición y la conquista y colonización de América. Esta edición que alcanza ya el lugar decimosexto entre las que la obra ha tenido, lleva un prólogo escrito por José María de Areilza en 1954.
La obra está realizada de modo profundo, minucioso y con arreglo a una acertada linea de sistematización. Para lograr un mayor efecto expresivo en los argumentos con que refuta las imputaciones de esta leyenda, el autor utiliza un logrado método antitético, a base de contraponer la actitud de España en la etapa imperial, a la conducta de las otras naciones europeas en el mismo periodo. El estilo es elegante, con cierta retórica grandilocuente, vestigio del gusto de la época. En esto, así como en la bibliografía, muy extensa pero referida al siglo XIX y difícil de localizar hoy, es en lo que más se aprecia el tiempo transcurrido desde que la obra fue escrita. En el resto, salvo algunas observaciones que el tiempo ha desmentido, la obra conserva vigente su interés crítico e histórico.
El autor muestra un vivo patriotismo, pero también una continua preocupación de imparcialidad. Evita la altanería o el triunfalismo en sus impugnaciones y procura hacer "historia adornada de verdades" objetivas. Rechaza la tenebrosa y falsa imagen que la leyenda negra ofrece del caracter español pero señala que su existencia se apoya, en principios, sobre la acción negativa de españoles resentidos como Antonio Pérez o el P. Las Casas, explotada luego por extranjeros como Guillermo de Orange.

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