LA MALDICIÓN DE LA SANGRE

Sciona ha luchado duro durante años para conseguir ser la primera mujer maga a la que admitan en la Alta Magistería de la Universidad de Magia e Industria. Cuando lo consigue, se tiene que enfrentar a un mundo machista, que la va a tratar con desprecio.
Para humillarla le adjudican como ayudante a uno de los conserjes de raza kwen, una raza estigmatizada, con el que no se lleva bien. Lo que ella no sabe es que antes de llegar a la ciudad era un guerrero nómada que perdió a toda su familia durante el viaje.
Novela feminista que parte de la lucha de la protagonista por conseguir un puesto en la universidad que se corresponda con sus capacidades e inteligencia. Se tendrá que enfrentar a un mundo de magos heteropatriarcal y machista de hombres desalmados, sin un ápice de compasión. Todos son cómplices de asesinatos en masa e incluso violadores. Solo su maestro parece tener algo de sensibilidad, pero está imbuido por un espíritu religioso de lo más integrista, que no le hace reaccionar ante la injusticia, por ser “voluntad de Dios”. El único hombre “humano” es el de una raza dominada, Thomil, que luchará con ella para liberarse del yugo opresor del imperio de hombres asesinos. Ni siquiera la protagonista parece humana, tiene una ambición sin límites y cuando se encuentra con una injusticia, hará saltar el sistema por los aires, sin tener en cuenta las consecuencias de caos y destrucción.
El libro parece influenciado por cierto feminismo.

Silvia Martínez