LA MEJOR VOLUNTAD

La familia Miller, Bob, Liz y su hijo Tommy han optado por un estilo de vida alternativo, alejados de los núcleos urbanos y se han organizado para ser autosuficientes. Durante años han levantado su granja, reciclado para fabricar sus propios muebles y se han adaptado a una vida en la que manejan solamente el dinero necesario para ciertos pagos necesarios como el autobús que lleva a su hijo al colegio. Es una relación sincera, basada en el respeto y comunicación. Han decidido posponer la educación en casa de Tommy para que él aprenda a interrelacionarse con otros niños. Se sienten orgullosos de su hijo, de cómo es y cómo está formándose.
Bob no entiende que Liz se haya comprometido con una comunidad religiosa y acuda los domingos a los servicios pero le deja su espacio.
Todo comienza a desmoronarse cuando desde el centro escolar les notifican que Tommy está acosando a una niña recién llegada. Los Miller intentan solventar esta situación y llegan a establecer una relación de cierta cordialidad con la madre de la pequeña que ha sido acosada, cuya vida es muy diferente a la escogida por ellos. Pero nada de esto frena el comportamiento de su hijo que llega a volverse realmente terrible e hiriente.
Desde el comienzo de la novela el lector tiene el presentimiento de que algo va a ocurrir, como efectivamente sucede al final cuando los Miller tendrán que abandonar su forma de vida para pagar por las acciones de su hijo. Él lo relata con resignación, pena y con cierta culpa por no haber sido capaz de orientar o educar a su hijo, mientras ella aceptará e incluso se acomodará a esta nueva realidad.
La novela recoge el soliloquio de Bill, que describe la vida de su pequeña familia con un tono sencillo, llano, cálido y muy pegado a la realidad pero en el que da cabida a sus pensamientos, deseos y sentimientos y a los de su esposa Liz. Un relato sumamente ameno, que se lee de un tirón y en el que como en otras obras de Smiley los lazos familiares tienen un especial protagonismo.
La autora norteamericana Jane Smiley (Los Ángeles, 1949) vivió en Saint Louis y estudió en la Universidad de Iowa, donde fue profesora y ahora vive en Carmel Valley, California. Obtuvo el Pulitzer en 1991 por su novela Heredarás la tierra.
La editorial Sexto Piso ha publicado en los últimos años otras de sus novelas, La edad del desconsuelo y Un amor cualquiera, ambas muy bien recibidas por la crítica y los lectores.

TROA