LA VIDA EN SORDINA

Un profesor universitario inglés se acoge a la jubilación anticipada debido, en parte, a su sordera, cada vez más acusada. Su narración cotidiana se hace desde las dificultades que le proporciona este problema, que se toma con sentido del humor: la relación con su mujer -casados ambos en segundas nupcias-, con una chica que quiere hacer la tesis y con su padre, un anciano que vive solo y al que visita de cuando en cuando.
La sordera es el hilo conductor de una vida sencilla y rutinaria en la que el protagonista evoca sus tiempos de profesor universitario. El estilo es tranquilo, afable, sencillo, como el carácter del protagonista. A veces se extiende en minuciosas descripciones de audífonos, en malentendidos, en los diálogos con la postgraduada para su tesis sobre los suicidas, en la relación sexual con su esposa. La vida cotidiana alimenta un libro de carácter costumbrista donde el sentido del humor es moderado, unas veces sobre temas intelectuales, otras sobre asuntos domésticos o conyugales. Está escrito en formato de diario pero sin respetar totalmente éste.

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