LA VIOLENCIA Y LO SAGRADO

Este es el principal ensayo de René Girard, un antropólogo y filósofo francés recientemente fallecido que escribió una importante obra y cuyas intuiciones sirven para entender tanto el mundo de hoy como el de ayer. Girard estudia aquí las principales culturas a fin de señalar cuál es el origen tanto de la sociedad como de la religión. Y se da cuenta de que, a tenor de los símbolos y relatos constituyentes, hay en el fondo de toda vida social y toda religión un hecho: la violencia. Girard no deja títere con cabeza y analizando la cultura griega y romana, entre otras, se percata de que como el hombre es un ser en conflicto con sus semejantes y tendente a la violencia es necesario apagar esta para poder convivir socialmente.

En este sentido, elabora también su tesis del chivo expiatorio, que es el mecanismo psico-social que permite terminar con la violencia. En efecto, las sociedades antiguas, con el fin de paliar el conflicto, atribuyen a un tercero -el diferente, el excluido- la culpa del odio y las luchas intestinas. Con el asesinato cultual del chivo, se produce mágicamente la pacificación de la sociedad. Girard no se inventa su teoría: la intenta verificar y lo consigue aludiendo a relatos míticos que, en efecto, muestran cómo hay en el inicio de la vida humana -social y cultural- un asesinato fundacional.

Ahora bien, La violencia y lo sagrado únicamente cuenta la mitad de la historia. Junto a este libro, hay que leer el resto, a los que este da pie. Porque Girard explica que, para que su teoría sea válida, es necesario confirmarla en la tradición judeo-cristiana. El problema en ella es que el mecanismo del chivo no funciona porque el judeocristianismo se asienta sobre el reconocimiento de la inocencia de la víctima. Por eso, a diferencia de las culturas paganas, en las que la religión nace de la violencia, la revelación judeo-cristiana es completamente diferente.

El libro es muy serio, riguroso. Se trata de una obra que ha servido tanto para estudiar la raíz de la violencia como para poner de manifiesto la extrañeza del cristianismo. Para gente con cultura y que busque profundizar de veras en el misterio del hombre.

TROA