- Editorial: PLAZA JANES
- Año de edición: 2016
- Materia: Novela policiaca y de misterio. Novela negra
- ISBN: 978-84-16195-44-2
- Páginas: 288
- Encuadernación: Rústica
- Colección: < Genérica >
- Idioma: Español
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Los bastardos de Pizzofalcone de Maurizio de Giovanni es el segundo episodio de la serie de novelas protagonizada por Giuseppe Lojano Inspector de policía de Nápoles que acaba de ser trasladado a una comisaría de mala fama, debido a la destitución de los anteriores jefes, condenados por sus prácticas corruptas. Calificados como los bastardos de Pizzofalcone, los agentes del centro, situado en un barrio de los suburbios se muestran ansiosos de recuperar el prestigio perdido. Para ello cuentan con el apoyo del inspector Lojano que acaba de resolver de forma brillante el caso del cocodrilo en el que habían fracasado los más prestigiosos agentes de la policía local.
El asesinato de una dama de la alta sociedad napolitana ofrece a los calificados de bastardos, la oportunidad de desmentir a sus detractores y demostrar sus cualidades como fieles servidores de la justicia. El inspector Lojano dirige las investigaciones guiado por una intuición certera que le permite establecer desde el principio la identidad del asesino y los motivos que le impulsaron a cometer el delito. Sin embargo, con el fin de reunir las pruebas necesarias y coger desprevenido al autor del crimen no revela sus conclusiones hasta reconstruir, de cara al proceso judicial, los hechos y circunstancias que rodearon el asesinato. Las tareas desarrolladas por los agentes alternan con el relato de las circunstancias personales y familiares que muestran sus vicios y debilidades aunque no les impiden el cumplimiento fiel de su deber. Lojano, divorciado y en trance de nuevo matrimonio, conserva el cariño de su hija adolescente y procura ayudarla a superar las relaciones difíciles con una madre de carácter obsesivo y dominante. Maurizio de Giovanni (Nápoles, 1958) describe con acentos poéticos el paisaje marítimo y urbano de su ciudad, que también sirvió de marco ambiental a su anterior y afamada serie del comisario Ricciardi situada en la década de 1930 en la misma capital napolitana. La homosexualidad de la agente Alexandra, aludida en un episodio no excesivamente detallado, introduce un elemento sexual que puede afectar negativamente la sensibilidad del lector.
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