LOS CRÍMENES DEL MONOGRAMA

Sophie Hannah recrea a Hércules Poirot siguiendo la estela de Agatha Christie. La acción arranca en 1929 cuando el detective belga se encuentra en un café londinense y una mujer le aborda para comunicarle que está a punto de ser asesinada. Poco después, en el distinguido hotel Bloxham de Londres aparecen tres cadáveres con aparentes signos de envenenamiento y con la característica común de que los tres tienen una mancuerna y un monograma en la boca. A este hecho se suceden otras muertes y el detective se implica activamente en la investigación con la ayuda de su colaborador Catchpool, siempre a la zaga de la sagacidad de su jefe. Se trata de un complejo caso cuyas raíces se remontan a lo ocurrido dieciséis años atrás. Una historia de amor y venganza y un criminal que ha falseado pistas, incluyendo la suplantación de identidad, para que los demás vean algo diferente a la realidad, todos menos Hércules Poirot quien, con sus peculiares métodos, descubre la verdad. La novela se cierra con la famosa escena de reunir a todos los personajes en un solemne final para desvelar la identidad del culpable.
La autora sigue los pasos de Agatha Christie y presenta un enrevesado argumento cuajado de relatos secundarios, dando pruebas de una gran imaginación y conocimientos de los recursos del género, elementos con los que consigue crear un clima de intriga que mantiene hasta el final. La trama resulta bastante más complicada que las habituales de los libros de Agatha C. cuya aparente sencillez era una de sus mejores cualidades. Hannah dibuja a Poirot con rasgos similares al genuino detective pero en su aproximación psicológica al personaje le falte quizá cierta autenticidad. Una novela policiaca entretenida y que se lee con agrado pero, tratándose del remake de una autora inclasificable, el lector siempre encontrará lógicas diferencias con el inconfundible estilo de la maestra del suspense.
Sophie Hannah es una escritora inglesa, autora de nueve thrillers psicológicos y poeta.

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