LOS LIBROS ARDEN MAL

Combina esta obra la narrativa, el ensayo y la crónica social para recrear, en términos próximos al realismo mágico, el ambiente de La Coruña en la época de la segunda república, la guerra civil y los años de gobierno del general Franco. Una serie de libros que fueron quemados en julio de 1936 en La Coruña, al considerar negativas las ideas que contenían por motivos religiosos, filosóficos o políticos, estructuran el desarrollo de esta compleja rememoración. La acción tiene un curso bastante errático y laberíntico, con gran cantidad de personajes cuyo papel en el conjunto de la trama no queda casi nunca claramente explícito en el momento de su aparición. El propósito del texto no es distraer al lector, ni siquiera ilustrarlo, ya que en él no se aportan perspectivas nuevas sobre los años de que trata. Más bien la obra parece ser una acumulación, un tanto fragmentaria y descoordinada, de impresiones, sentimientos y actitudes atribuidos a quienes no coincidieron ideológicamente con el resultado del fracaso del segundo intento republicano en España y el desenlace de la guerra subsiguiente. Las mejores páginas son aquellas en que los elementos humanos, paisajísticos y costumbristas se imponen a la intencionalidad extraliteraria de denunciar al sistema imperante, que resulta muy evidente incluso revestida de una intensa elaboración formal. Inevitablemente subjetivo, el libro demuestra una vez más que la letra impresa resiste cualquier persecución, pero también que puede servir para interpretaciones no siempre justas e imparciales, como ocurre aquí con prejuicios de carácter anticlerical.

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