LOS MONSTRUOS QUE RÍEN

El titulo de la nueva novela de Denis Johnson, Los monstruos que ríen, alude a dos montañas congoleñas. Está protagonizada por Roland Nair, agente escandinavo enviado por la OTAN a Sierra Leona para vigilar a un viejo amigo, Michael Adriko, mercenario de Uganda que ha reunido una gran fortuna a base de oscuros turbios durante la guerra civil en el país. Nair espera su próxima estratagema pero Michael, además de ofrecerle un elenco de prostitutas adolescentes y seguir ganando dinero le interesa sobre todo su boda con Davidia, una estudiante norteamericana, hija de un comandante de Estados Unidos. Los tres viajan a Uganda para que el clan de Ardiko acepte a su novia. Un trayecto de aventuras y peligros en el que Nair sigue sin saber lo que se esconde en la mente de Michael.
La historia, contada por Nair en primera persona, va dirigida a su novia Tina y se desarrolla ágilmente y con equilibrio de textos y diálogos. A lo largo de la narración se incluyen interesantes comentarios sobre política internacional o sobre el cambio mundial a raíz del atentado del 11-s, etc. también se muestran con realismo las características de una zona africana deprimida económicamente y que Johnson presenta como la otra cara del mundo, totalmente desconocida para los occidentales. Por lo demás, hay escasa acción y la intriga se diluye en un relato mixto y bastante ligero con abundantes retratos ambientales y alguna referencia a la promiscuidad de Nair aunque sin descripciones. Cierto escepticismo domina un libro que no es la mejor obra de espionaje del autor.

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