ME DESCONECTO, LUEGO EXISTO

Catela, periodista y profesor universitario, analiza en este libro el condicionamiento que supone para los jóvenes, y también para los adultos, estar enganchados continuamente a las redes sociales y a internet. Habla de adicciones porque considera que lo son, como las drogas, o el juego, aunque de distinta naturaleza. No propone rechazar el móvil ni el uso de internet, sino que habla de evitar que fagociten nuestra vida.
Por eso plantea una dieta digital: saber cuánto tiempo diario pasamos en Internet y en qué invertimos ese tiempo para ver el modo de limitar su uso. Comenta también los aspectos negativos -el peligro de wasapear conduciendo, o la necesidad de matarse por un selfie de riesgo-. Pero, en general, se manifiesta moderadamente optimista sobre las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías, usadas con sentido común. En definitiva, un libro interesante y de amena lectura que acomete con inteligencia un tema complicado. En el subtítulo explica su intención: Propuestas para sobrevivir a la adicción digital.

Carmen Juste