MEMORIAS DE UNA VIUDA

La autora es esta vez la protagonista de sus memorias en las que relata la dolorosa experiencia de sufrir la muerte repentina de su marido, al que estaba muy unida. Joyce sufre la muerte de Ray de manera trágica, en soledad y cayendo en un largo insomnio y depresión. Los fármacos le hacen poco efecto, o le causan efectos secundarios y no quiere depender de ellos. Las ideas de suicidio se tratan a menudo, también en su taller literario. Joyce repasa algunos momentos de su matrimonio con Ray y, al final, lee su manuscrito de una novela en la que descubre cómo se sentía presionado por el catolicismo de sus padres e incluso entró en el seminario para hacerse sacerdote, pero lo abandonó pronto.La diferencia más llamativa con otras novelas de Oates es la ausencia de sexo y de violencia. Joyce nos enseña su matrimonio: una relación entre dos intelectuales con sentido del humor, que se compenetran, respetan y aman durante toda su vida. Indaga en la imposibilidad de llegar a la intimidad del otro en el matrimonio: siempre queda un espacio de otredad??. Su estilo es tan directo, sencillo y emocionante que nos cautiva. Y un tanto obsesivo, como el de una viuda a la que persiguen pensamientos insistentes de rabia, dolor, impotencia, soledad, suicidio por el sinsentido de una vida sin su marido. Resulta un elogio del matrimonio y, a la vez, una novela sobre cómo afrontar la muerte sin tener hijos y sin trascendencia.

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