NOCTURNA

Novela de terror, primera entrega de una trilogía, que arranca cuando un Boeing procedente de Berlín aterriza en Nueva York y sus luces se apagan. Todos los pasajeros, excepto cuatro, aparecen muertos, y la ciudad se queda a oscuras por un eclipse de sol y algunos edificios son arrasados. Al día siguiente los pasajeros que sobrevivieron huyen de los hospitales y, sedientos de sangre, atacan a sus familiares. Dos epidemiólogos se unen para combatir esta amenaza: un virus desconocido capaz de mutar a los infectados y convertirlos en vampiros. Juntos se enfrentan a unos seres repugnantes y con un poder desconocido, y a un siniestro personaje que simboliza el Mal -el Amo- que pretende destruir el mundo empezando por Manhattan.
Esta terrorífica novela tiene un nivel literario elemental, a lo que contribuyen algunos defectos de traducción. El lenguaje está al servicio de la trepidante acción, que logra atrapar a los lectores adictos al género. El autor se ha documentado a fondo y el libro ofrece mucha información científica, teñida de una poderosa imaginación, y con estos dos elementos construye un relato de ficción de tono apocalíptico, donde todo es posible. El ritmo es angustioso, propio de una película de acción, y el estilo es totalmente visual, con abundantes páginas violentas, algunas de ellas bastante repulsivas. Se incluye en la trama una secuencia de sexo. Los personajes humanos no presentan perfiles interesantes, mientras que los sanguinarios vampiros están muy bien caracterizados, pues constituyen la esencia de la trama. Se detecta una alusión de fondo al bien y el mal como fuerzas que luchan entre sí.

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