NÚMERO CERO

Esta nueva novela de Umberto Eco, Número cero, desarrolla una tesis social y política dedicada a criticar la corrupción de los gobernantes italianos y a denunciar la manipulación informativa como práctica habitual del periodismo de opinión. La acción transcurre en Milán entre el 6 de abril y el 11 de junio de 1992 y tiene como personajes principales al director y al redactor jefe de un proyecto periodístico financiado por un magnate del sector hotelero, dueño además de una cadena de TV y de revistas basura.
La trama se centra en las sesiones de trabajo de los seis miembros del equipo de redacción dedicados a diseñar el número cero de un diario cuya fecha de aparición todavía no ha sido confirmada. A lo largo de las reuniones, en las que el director aprueba o rechaza las diversas propuestas de los colaboradores, Umberto Eco ofrece una detallada visión de los métodos empleados para seleccionar, redactar, interpretar, maquillar u omitir noticias. La manipulación a que se somete a los lectores, indicándoles cómo deben pensar, para luego convencerles de que la prensa recoge lo que ellos piensan, se expone con un realismo mitad cínico y mitad irónico, que se aproxima bastante a la práctica habitual en ciertos medios informativos, que tienden sobre todo a desinformar. En paralelo a este plano argumental, aparece otro, relativo a la investigación que uno de los periodistas está desarrollando por su cuenta. Según los datos que maneja, y a partir de las supuestas dudas sobre si Benito Mussolini murió realmente en 1945 o logró salvarse con ayuda del Vaticano siendo ejecutado un doble del Duce en su lugar, se desarrolla una larga historia de engaños y conjuras. En ellas la CIA, la logia P2, la muerte del papa Juan pablo I, monseñor Marcinkus, el Banco Vaticano, el cardenal Villot, y políticos como Cossiga, Sandro Pertini y Giulio Andreotti, intervienen en una supuesta maraña de complots cuyo conocimiento acaba costando la vida a su descubridor. Escrita con técnica de “bestseller” y estilo coloquial de léxico vulgar, la novela ofrece una sátira literariamente modesta que incurre en los mismos vicios que denuncia y se distancia de la calidad que tienen anteriores títulos del autor.

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