PAX

Titulado en inglés y en latín por el Queens College de Cambridge y doctor en Historia Antigua en la Universidad de Oxford, Tom Holland ha publicado libros como Rubicón, Dinastía, Dominio, que están entre el ensayo académico lleno de rigor documental y la divulgación. También se ha interesado a través del mundo clásico, por el papel del cristianismo.
Pax, trata de la historia del imperio romano desde la muerte de Nerón, y el final de la dinastía Julio-Claudia, la época de los cuatro emperadores: Galba, Otón, Vitelio y el comienzo de la dinastía Flavia con Vespasiano, Tito y Domiciano. Comienza con Nerva la dinastía Antonina, Trajano y Adriano. Y ahí llega la narración.
No se trata, pues, de la conocida como la pax augustea sino de una época posterior en la que no faltan conflictos.
Con gran detenimiento recoge los éxitos y principales dificultades con que se encuentran estos emperadores. Dificultades externas e internas. La época de los cuatro emperadores, breve en el tiempo, supone una gran inestabilidad interna. Los principales conflictos a los que se enfrentan son problemas en las fronteras del Danubio, e insurrecciones entre los judíos que provocan la destrucción de Jerusalén por parte de Tito.
Se detiene en Adriano, el emperador filósofo, anterior a Marco Aurelio. Preocupado no sólo por las guerras sino también por las construcciones como la muralla de Adriano, y en Roma: el Mausoleo de Adriano, la terminación del Panteón y la villa Adriana en Tívoli. Y su curiosa relación con Antinoo, un bellísimo joven que murió pronto y al que quiso incluir en el panteón de los dioses romanos.
La documentación es amplia y el conocimiento que ofrece es muy detallado, por lo que prevalece su carácter académico al de divulgación sin que sea difícil seguir la narración. Muy interesante para quienes estimen estos conocimientos y de excesivos datos para el público general.

Carmen Trigo