SEGUNDA CASA

Segunda casa de Rachel Cusk es una novela breve pero con un tema y tratamiento originales. La narración en primera persona corre a cargo de la protagonista, una mujer de mediana edad, casada, que vive en un bello entorno pantanoso con su marido, Tony, de pocas palabras y algo anodino. Ella recuerda a un artista que conoció hace tiempo y lo invita a pasar unos días en la zona de invitados de la casa para evocar recuerdos. Por su parte, Tony invita a una amiga y su hija se traslada allí también con un joven, ya que para ellos la casa es un lugar “donde la gente puede quedarse y estar completamente sola si así lo desea”. Aunque luego en la vida cotidiana surjan conflictos inevitables. Cusk construye un relato de tipo psicológico y de connotaciones artísticas a la vez que describe la interacción de las distintas parejas, sus diálogos y desencuentros, todo de forma elíptica y difuminada. La novela resulta algo enigmática, mezcla la realidad y lo imaginado, los sueños y la complejidad de las relaciones humanas de carne y hueso, también desde un prisma sentimental. La brillante prosa de la autora salva espléndidamente los muebles y convierte una trama aparentemente anodina en una historia que se adentra en temas de calado como el amor por el trabajo material, el desencanto hacia el arte así como la decepción y pequeñas alegrías que surgen durante la edad mediana. Segunda casa quiere ser según su autora un homenaje a la memoria de Lawrence, escritor estadounidense de comienzos del siglo XX, cuya biografía, bastante transformada por Cusk, se esboza en estas páginas.

TROA