SOMBRAS DE AGUA

Sombras de aguja es una novela histórica con elementos de ficción que Félix G. Modroño inicia en 1684 cuando el doctor Zúñiga sale de Valencia, donde ha sido robado el Santo Grial, en dirección a Venecia para desarrollar una decisiva misión diplomática. En paralelo se describe la trayectoria de una esclava llamada Águeda que es aficionada a la música; por su condición vive dominada por distintos amos con diferente suerte aunque una serie de circunstancias le llevaran a encontrar el amor. La ciudad italiana se halla en pleno carnaval, además se ha convocado un congreso sobre el pensamiento de Aristóteles adonde acuden Newton y Leibniz entre otros científicos. Al frente de esta reunión esta Elena Corner Piscopia, la primera mujer poseedora de un doctorado universitario con la que Zúñiga establecerá una relación sentimental. En ese ambiente festivo y cultural también se cierne el peligro y el dogo encarga al doctor que investigue el origen de un mensaje anónimo que amenaza con el fin de Venecia. Cuando el dogo y un inquisidor son asesinados, los acontecimientos se precipitan ya que parece haber una siniestra y oculta conspiración que se recrudece cuando es secuestrada Elene Corner.
El autor ofrece una correcta ambientación histórica de la época mostrando la belleza artística y las peculiaridades de la Venecia del siglo XVII en la que la fiesta del carnaval y las mascaras que ocultan el rostro aportan un factor añadido de misterio y atractivo junto con la frivolidad de ciertos juegos amorosos del momento. Estos elementos son los más destacables desde el punto de vista narrativo ya que se trata de un relato lineal construido con prosa sencilla y unos protagonistas escasamente dibujados. La trama alterna intriga, aventuras, las inquietudes religiosas de algún personaje y ciertos recursos románticos con leve erotismo. Su lectura resulta entretenida.

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