TODO LO CARGA EL DIABLO

Benjamín Prado regresa con la quinta entrega de la serie protagonizada por el profesor Juan Urbano. Todo lo carga el diablo trata de una investigación que arranca en los últimos días de la Segunda República española. En este caso, Urbano investiga la trayectoria de tres deportistas españolas, amantes del esquí y universitarias en el Madrid de la segunda república: Margot Moles, Ernestina Maenza y Caridad Santafé, atletas en una olimpiada de invierno en la Alemania nazi, nombres que, posteriormente, fueron borrados de la historia, en gran parte por ser mujeres. El caso de Caridad Santafé es algo diferente, casada felizmente con un falangista acérrimo, todo parece sonreírle hasta que la división ideológica y los interés políticos conviertan su vida en una existencia terrorífica y sea perseguida incluso por sus familiares más allegados. Prado sitúa la acción de forma colorista en distintos escenarios de la época: la Residencia de Estudiantes, el Instituto Escuela, la Residencia de señoritas o los cafés donde se reunían los humoristas de La Codorniz así como los campeonatos femeninos deportivos. Cuando estalla la guerra civil, España se divide en dos bandos irreconciliables y, a su término, todo parece haber cambiado. Algunos años después, el hijo de Caridad Santafé encarga a Juan Urbano que investigue el paradero de su madre y, tras complicadas pesquisas, se descubre una espantosa trama de manipulación y psiquiátricos convertidos en cárceles donde un puñado de personas, especialmente mujeres, sufrieron todo tipo de vejaciones. La novela se cierra con un final bastante sorprendente. Prado ambienta detalladamente la atmósfera del Madrid del momento con estilo ágil y flexible que permite al lector situarse bien en la época. La visión ideológica que se manifiesta a lo largo de toda la trama, en la que hay elementos históricos y recursos de ficción, está claramente a favor de la Segunda República, con todo lo que eso lleva consigo.

TROA