UN ARQUEÓLOGO NÓMADA EN BUSCA DEL DR. JONES

Jordi Serrallonga (Barcelona, 1969) toma el personaje cinematográfico de Indiana Jones como referente vital y eje estructural de este libro, que por eso se titula Un arqueólogo nómada en busca del Dr. Jones.
El autor se autodefine como “arqueólogo, naturalista, explorador y peliculero” y realmente el libro trata de estas cuestiones, contadas con mucha amenidad y un estilo literario sobrio, suelto y directo. Es un buen comunicador. Tiene publicados otros libros de divulgación científica y colabora con distintos medios de comunicación. Comenta que “actualmente compagino la docencia universitaria con esa parte tan esencial como seductora de la disciplina arqueológica que es el trabajo de campo, rebosante de vivencias, ciencia y misterio”.
Y eso es lo que nos cuenta en este libro, que trata principalmente de arqueología, sí; pero también de otras muchas vivencias del autor. Empezando por haber conseguido su sueño de ser arqueólogo, después de ver en el cine la primera película de la saga de Indiana Jones (“Indy” para los amigos). Porque Serrallonga sabe todo sobre Indiana Jones. Y con constantes referencias a este personaje, nos describe cómo vive él su trabajo de arqueólogo.
El libro es una mezcla de autobiografía, manual de arqueología, ensayo antropológico y libro de viajes. Está dividido en capítulos que abordan temas diversos: al terminar, se he hablado de vivencias que son auténticas aventuras, evolución, docencia, amor, animales, cultura, vocación profesional, amistad, roles sociales de mujeres y hombres, Charles Darwin y otras personalidades, historia, naturaleza, exploraciones, películas, relaciones sociales, etc.
Cada capítulo comienza con una frase de “Indy”, que tiene que ver con lo que se va a comentar en esas páginas. Las frases están tomadas de películas de Indiana Jones.
Antes y después de la frase inicial de cada capítulo, hay dos ilustraciones de alguno de los cuadernos de campo del autor. Los dibujos, sencillos, clarificadores y simpáticos, van acompañados de breves textos. Son un magnífico ejemplo de qué es un cuaderno de campo y su importancia.
También acompañan cada capítulo algunas fotografías. Y el libro cuenta al final con una bibliografía, filmografía e índices analíticos completísimos.
El libro lo disfrutarán jóvenes y mayores, porque en el fondo, a muchos gusta la arqueología o quisieran ser arqueólogos. Como comenta el autor, “bienvenidas y bienvenidos al universo de un arqueólogo nómada, un primate con sombrero, en busca perenne del Dr. Jones”.

TROA