UN ASUNTO SUCIO

Marco Vichi regresa con una nueva novela negra protagonizada por el comisario Bordelli titulada Un asunto sucio. La acción se desarrolla en Florencia en 1964 y arranca cuando avisan a Bordelli de que ha aparecido un cadáver con signos de violencia en un bosque cercano. El comisario y un agente acuden al escenario del crimen pero no hay ni rastro del cadáver. A este suceso le siguen los asesinatos de unas niñas junto con otros crímenes, en algún caso una salvaje violación y siempre, con la marca de una extraña y cruel señal, por lo que se apresuran a buscar a un asesino en serie. Bordelli, un hombre duro y de gran personalidad aunque con una vida afectiva deshilvanada, se enfrenta a una ardua tarea y la investigación se hace lenta y farragosa pues no hay un aparente nexo común entre las víctimas. A través de numerosos interrogatorios y una serie de pistas clave que van apareciendo, Bordelli se aproxima a descubrir una vendetta relacionada con hechos acaecidos tiempo atrás, aun con vestigios de la Segunda Guerra Mundial.
M. Vichi construye una trama negra con estilo realista, prosa eficaz y excelente ritmo junto con la destacable figura de un peculiar comisario que posee una intuición especial. Un tipo algo desencantado que se deja cuidar por una prostituta mientras tiene una amante de la que consigue información; a lo largo de la historia hay algunas referencias permisivas y de tipo prostibulario aunque sin referencias de entidad. La novela está muy bien elaborada y su autor imprime a la narración un toque muy italiano y la enmarca en la atmósfera florentina de los sesenta, recurso que aporta interesantes apuntes y cierta suavidad a la dureza del relato.

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