UN CAPITULO DE MI VIDA

Barbara Honigman, nació en Berlín Este en 1949 y es considerada una de las voces más notables de la generación de posguerra. Hija de madre judía poco practicante y de firmes convicciones comunistas, se educó en un ambiente de gran carga política y ligereza moral, aunque en un entorno intelectual que iría evolucionando hacia el desencanto al contemplar un comunismo fracasado lejos de los ideales de progreso y libertad por los que lucharon.
Su madre fue la primera esposa de Kim Philby, el famoso espía de origen británico al servicio de la KGB que se inició en el espionaje con gran éxito durante la Guerra Civil española haciéndose pasar por corresponsal afín al régimen de Franco.
Un capítulo de mi vida es un libro de memorias cuyo título hace referencia a la expresión que utilizaba su madre, Litzy Friedman, al referirse al periodo en el que estuvo casada con Kim Philby. La fama que éste alcanzó como espía llevaría a periodistas y escritores a interesarse por su vida, que se vería rodeada de secretismo y falsas interpretaciones por las escasas declaraciones que Litzy hizo al respecto. Sólo cuando se exilió de Alemania Oriental, y poco antes de morir, decidió referir a su hija, Barbara Honigmann, algunas de aquellas vivencias, pero tan escasas y tan poco clarificadoras, que no lograron despejar la duda sobre su implicación en el espionaje como agente soviética y su papel en la captación de Philby cuando era un simple estudiante en Londres.
Barbara Honigmann cuenta la historia de su madre intentando dar luz sobre la vida de una mujer cuya vida caótica y cargada de contradicciones marcó su compleja personalidad. Se apoya para ello en su memoria, en lo que la misma protagonista le contó en su momento y lo vivido por ella misma mientras compartieron su vida en Alemania Oriental. Honigmann escribe con sutileza sobre una época compleja durante la Guerra Fría, y se muestra con discreción y respeto hacia los personajes que han formado parte de esta historia.

Encarnita Herraiz