UNA SUERTE PEQUEÑA

Claudia Piñeiro regresa con Una suerte pequeña, novela intimista en la que narra cómo una mujer –Mary Lohan, Marilé o Maria Elena Pujol, según se considere el pasado o el presente- retorna después de veinte años a Temperley, un suburbio de Buenos Aires de donde salió huyendo de una desgracia que no fue capaz de afrontar. Marilé era una profesora casada y con un hijo de seis años, cuya vida cambió radicalmente tras un accidente de tren en el que, inconscientemente, cometió una imprudencia de consecuencias dramáticas ya que murió el amigo de su hijo. En su entorno nadie le perdona lo ocurrido, ni las madres del colegio ni los vecinos ni siquiera su marido que la desprecia y deja de apoyarla. Ante tal presión psicológica, Marilé decide escapar de Argentina, abandonando a su familia y cambiando de nombre. Totalmente deshecha, en el avión que la conduce a Boston, conoce a Robert, que la acoge en su casa y con quien comienza una relación amistosa que termina en idilio.
La novela, cargada de fuerza expresiva y emotividad, aborda el tema del silencio, de la incomprensión, y de las consecuencias de un trágico suceso que llegan a marcar toda una existencia construyendo un argumento que presenta diversos puntos de vista sobre lo ocurrido: el de la protagonista, el de la gente que le rodea y el de su hijo, veinte años después. La autora sostiene la trama a partir del magnífico personaje de Mary Lohan y añadiendo cierto tono de suspense que se mantiene desde el arranque hasta al final. Claudia Piñeiro disecciona en esta historia, escrita con potente lenguaje, interesantes mensajes como son el sentimiento de culpa, el perdón y la necesidad de acepar los fallos de los demás.

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