Una expresión muy querida por San Josemaría
Escrivá de Balaguer, como reflejo de la fidelidad a
Cristo, era la de
sacrificio escondido y silencioso
. “El
mundo admira solamente el sacrificio con espectá-
culo, porque ignora el valor del sacrificio escondido
y silencioso”, había escrito en
Camino
(n. 185). Y
repite las palabras en la misma obra, señalando
quién era a su juicio el ejemplo por antonomasia de
su cumplimiento: “¡María, Maestra del sacrificio
escondido y silencioso!” (n. 509).
Camino
vio la luz en 1939, pero esta idea y estas
palabras ya estaban literalmente recogidas en unos
apuntes personales en 1932, y en un documento
escrito en 1934. Por entonces no conocía a quien la
providencia divina tenía destinado a ser su más
Beatificación
Álvaro del Portillo
Por Julio de la Vega-Hazas
ÁLVARO DEL PORTILLO
SL
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