Selección Literaria Nº 61

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«Antes de
que sea
demasiado
tarde»
ENTREVISTA A SL
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Entrevista a Raquel Martín
¿Cómo surgió la idea del
libro? ¿Por qué decidiste contar todo
lo que hay dentro?
Fui a Erbil, el Kurdistán iraquí el pasado
mes de marzo con un grupo de
periodistas de la fundación Ayuda a la
Iglesia Necesitada. El objetivo era
informarnos de la situación de los
120.000 cristianos que en la primave-
ra-verano de 2014 habían dejado sus
tierras milenarias, la Llanura de Nínive
ante el zarpazo del terrorismo islámico.
Por primera vez, el valle y todas sus
ciudades quedaron vacías de cristia-
nos. A decir verdad, fue Dario Chimeno
en nombre de Palabra quien me
“persiguió” para que escribiera todo lo
que había visto. Si me decidí a hacerlo
era porque gracias a las fotos de
Ignacio Zorí podríamos encarnar el
dolor de los cristianos perseguidos y
porque quien me lo pedía era una gran
editorial.
¿Qué pretendes con “Antes
de que sea demasiado tarde”?
Pretendo poner ojos, cara, rostros,
nombres y apellidos a nuestros
hermanos perseguidos por su fe.
Contar sus historias, todas reales. No
hay ninguna historia en el libro novela-
da o ficticia. Todo lo que aparece es
verdad. Quiero mostrarles tal y como
son, hombres y mujeres normales y
corrientes. No son más fuertes ni más
valientes que nosotros. No quieren ni
oir la palabra héroe. Sólo son hombres
determinados por su fe en Jesús, y por
Él son capaces de dejarlo todo.
¿Cómo va a ser la Navidad
para estos cristianos de Irak?
Estoy convencida que será una
Navidad muy consciente y muy verda-
dera. Para ellos la Navidad o la Semana
Santa no son días sin más. Este
pequeño pueblo cristiano que todavía
permanece en Irak sabe bien quién es
Jesús para ellos. Para ellos es muy real,
cercano que se haya hecho carne y
esté presente en la tierra, sino, sería
imposible que siguieran fieles. Lo
celebrarán por todo lo alto, es lo más
valioso que tienen.
Aida, un perso-
naje real de Irak, cuenta
el secuestro de Cristina,
su hija, diciendo que está
“tranquila, porque Jesús
se la va a devolver”.
¿Cómo pueden tener
tanta fe con lo que están
viviendo?
Ellos no han dudado ni un
solo segundo que el
Señor, su Señor les haya
dejado abandonados.
Saben que están en buenas manos.
Pertenece a Él, no a la tierra ni a
ningún otro poder. ¡Cómo debe ser la
relación tan cercana con Jesús como
para no dudar de Él! Aida es una mujer
que parece muy frágil físicamente, está
agotada por el sufrimiento, pero es un
roble por dentro. Una seguridad que
no es de este mundo. Es la certeza de
saberse querida por el Señor.
¿De los testimonios que
recoges, a ti cuál te ha impactado
más?
Quizás el de Aida. Soy madre y no me
puedo imaginar la tortura que debe
ser que te arranquen a tu hija de tres
años de los brazos. Sin
embargo, en ella sólo
salen palabras de abando-
no absoluto, de confianza
en Dios.
¿Has visto ya
algún cambio en Nínive
gracias a tu libro? ¿Ha
habido movilización?
Lo que quisiera en primer
lugar es que hubiera un
cambio en el corazón de
los que lo lean. Que no les
dejara indiferentes el
dolor de nuestros hermanos cristianos
de Irak porque son “nuestros”, son
“mios”. Que nos sintiéramos parte de
ellos y que, entonces, saliéramos
corriendo a contar a todo el mundo la
limpieza étnica que se está producien-
do y no dejáramos de ayudarles en lo
que necesitaran.
Palabra 144 págs. 14,50 €