el loco con el coche. Me di cuenta de que había que
tener mucho cuidado con lo que se deseaba porque se
podía cumplir. Y esome inspiró «La Bruxa», sólo que lo
conté en un tono de humor. En «Cuerdas» me quité
todas las corazas y salió esta historia. Nome considero
una persona especialmente sensible, ni muchomenos.
Bueno... sí, tengo momentos sensibles y tengo
momentos canallas como todo el mundo. Seguro que
si no hubiera tenido a mi hijo no me hubieran salido
estas historias; se me hubieran ocurrido otras cosas.
Seguro que a tu hijo no lo cambiarías por
nada. Además, has sabido convertir en positivo algo
que otros considerarían negativo, una lastre para la
vida. ¿Dónde está el secreto para llevar esta situación
con la sonrisa que tú luces siempre y haber sabido
tomar pie de un problema para transformarlo en una
historia hermosa?
Bueno, sí que cambiaría a mi hijo por mi mismo hijo
sano. Seguramente echaría de menos alguna cosa,
pero lo cambiaría sin lugar a dudas, como es natural.
¿Mi sonrisa?... bueno, es que uno no puede estar
sufriendo todo el día. La gente se apartaría de ti. Esa
parte más dura la guardo para la intimidad. Todo el
mundo pasa por situaciones tristes y hay que asumir-
las como ley de vida. ¿Cómo lo he conseguido conver-
tir? Yo he practicado kárate durante años en una
modalidad que pone el acento en aprovechar la fuerza
del contrario. Lo que he intentado es aprovechar este
golpe que te da la vida para intentar placarle. Si la vida
te da la espalda, pellízcale la nalga, dice el refrán.
Pero hay gente que afronta situaciones como
la tuya de una forma mucho más negativa.
Bueno, la suerte es que yo tengo un grupo de amigos
que, además de serlo, son los mejores en el mundo de
la animación en España. Y me han permitido encauzar
esa inspiración centrándome en este cortometraje en
vez de pasar el tiempo tomando cañas en un bar
quejándome por mi mala suerte. Hay mucha gente
que no tiene esa suerte. Si no hubiera sido por este
gran equipo de amigos, no hubiera hecho «Cuerdas»,
ni “La Bruxa. Probablemente habría hecho otra cosa...
no sé... correr más. He tenido la suerte de que he
podido orientar mi situación hacia algo creativo y así
han ido saliendo mis historias.
La discapacidad de tu hijo te ha aportado
cosas positivas, entre otras la posibilidad de narrar
historias bonitas. ¿Qué crees tú que la discapacidad,
la pobreza, las situaciones difíciles del ser humano
pueden aportar a la sociedad?
Bueno, es también la sociedad la que debe aportar a
esas situaciones difíciles. Muchas veces he considera-
do que en ocasiones la vida te besa en los labios y en
otras te da un bofetón. Yo estoy acostumbrado a que
me haga las dos cosas. La vida es unamontaña rusa de
emociones. Llevo unos años viviendo una parte precio-
sa demi vida gracias a los largometrajes y los cortome-
trajes, pero esto se pasa. Sin embargo, la situación de
mi hijo está ahí constantemente. Eso no seme olvida, y
me ayuda también a tener los pies en la tierra y que no
se me suba nada a la cabeza.
Bien, pero aunque la parte más difícil la estás
viviendo tú, quien se está beneficiando de tu trabajo
es la sociedad.
Tampoco puedo decir que he hecho un trabajo que
beneficie a la sociedad. Eso lo hacen los médicos que
curan, los policías que vigilan de madrugada, o los
barrenderos que nos mantienen limpias las ciudades.
No.... yo no he hecho nada.
Pero... no es verdad. El público se emociona
con tus historias, y eso es aportar mucho a la socie-
dad.
La verdad es que está dando unas vueltas muy curio-
sas este Goya. Al día siguiente de ganarlo se pusieron
CUERDAS
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He tenido la
suerte de que
he podido
orientar mi
situación hacia
algo creativo y
así han ido
saliendo mis
historias.