SL
PENSAR Y ESPIRITUALIDAD
34 FUNDACIÓN
TROA
A
lejandro Llano es hombre entrado en años
—
va
ya por los 74
—
, que en su vida laboral ejerció como
catedrático de Metafísica en la Universidad Autónoma de
Madrid y en la de Navarra, además de ser rector de esta
última durante un quinquenio. Como todo
cátedro
que se
precie, ha publicado unos cuantos libros, que incluso bien
pueden calificarse de numerosos, alguno de ellos una vez
traspasada la edad de jubilación. Y entre todos hay uno
que tal parece ser su
ojito derecho
, probablemente por
transcribir de modo más cabal su pensamiento, sin
descartar que también por recoger mejor el legado que
desea dejar a las generaciones venideras.
La nueva sensibilidad
no es, pues, un libro
nuevo
, visto que
fue ya publicado hace unos treinta años y reeditado varias
veces. Sin embargo, el apego a este texto, el valor que le
otorga y el empeño porque su propuesta intelectual no
solo no caiga en el olvido, sino que alimente todavía la
mente de nuevos lectores, han llevado al autor a evitar que
el libro languidezca, dedicando tiempo a revisarlo y
promoviendo su edición ampliada.
Aparte de circunstanciales actualizaciones de ciertos datos
y algún otro detalle, la revisión más patente estriba en la
supresión inmisericorde de todas y cada una de las notas a
pie de página. Cabe apreciar en ese gesto una superación
del encallecido prurito académico por multiplicarlas, como
si del número de notas tantas veces meras remisiones a
libros no leídos, sino pescados en caladeros solo para ser
referenciados dependiera casi en exclusiva la altura y
calidad de una publicación. Y la verdad es que, para
quienes gozamos en su día leyendo la versión anterior de
La nueva sensibilidad, ha supuesto un alivio, dado que las
notas en cierto modo enredaban y retardaban la lectura,
como casi siempre sucede.
La ampliación del libro incluye un nuevo prólogo, antepues-
to a la antigua introducción, titulado La era de la desco-
nexión. Resulta ser todo un señor capítulo que, además, se
presta bien como novedoso subtítulo de la obra. Interesan-
te, muy interesante la alerta anti-intelectual que lanza ahí a
propósito de las nuevas tecnologías, desconectadoras de
todo entorno personal y ambiental. Frente a ingenuos
modernoides, observa: «el pensamiento humano es
esencialmente dialógico: hemos de pensar en diálogo con
otros».
Por nueva sensibilidad entiende el profesor Llano un modo
de pensar no meramente intelectualista, sino más bien una
capacidad de percepción de lo inmediato, de lo cualitativo y
de lo plural, de lo solidario, de un mundo bien entroncado
en la realidad y abierto a las personas con quienes
trabajamos, nos relacionamos y convivimos. Se trata, en
suma, de una inteligencia comprensiva, que recoge la
variada integridad de lo real por medio de una mayor
capacidad perceptiva. Y se atreve a afirmar que «la
aparente debilidad de este realismo sin empirismo oculta
la mayor fuerza de la que dispone el hombre».
Búsqueda de la verdad, perfeccionamiento ético y desplie-
gue de la cultura, caracterizan a este humanismo concep-
tual y vital, ciertamente cristiano, necesario hoy más que
nunca frente a toda instrumentalización de la persona.
Como bien dice, la urgencia apremiante de una nueva y
auténtica ecología humana «potencia la necesidad de una
verdadera antropología».
Alejandro Llano escribe con un castellano correcto y
cercano al lector, lejos de las opacidades y/o abstractas
nubosidades que tantas veces se achacan a los filósofos en
sus exposiciones. Ciertamente, tampoco estamos ante un
prontuario de recetas ni ante una novela de tesis, sino ante
un libro de pensamiento. Su calidad expositiva, sin
embargo, es real, algo que quizá no alcanzan los dos
párrafos precedentes, resumen apresurado del contenido
de una obra de más de doscientas páginas.
Pensar
La nueva sensibilida
dde
Alejandro Llano
Ladislao Melgar García-Inés
Palabra | 14,90 €