N
arra esta novela la vida de una
joven madre que vive con su marido y su
bebé de meses en un gigantesco vertedero,
de cerca de doce hectáreas, próximo a Nom
Pen, la capital de Camboya. La acción refleja
los problemas económicos del matrimonio
para pagar el alquiler de su mísera chabola
de tres paredes y su preocupación por la
mala salud del niño, aquejado de continuas
diarreas que le impiden desarrollarse
debidamente, sin que los curanderos que
sus padres pueden pagar consigan devolver-
le la salud. Convencida de la necesidad de
cambiar de modo de vida para que su hijo
sane, la protagonista propone a la mujer
encargada de cobrar los alquileres en el
vertedero, persona agria y alcoholizada, que
le enseñe a leer. Debido a una circunstancia
especial, contra toda lógica, esta accede y así
en medio de la inmundicia, la podredumbre
y la contaminación surge una relación
humana que convierte el vertedero en un
lugar donde cabe la esperanza. Con mucho
esfuerzo por su parte, la campesina
analfabeta e inculta persevera en su
esfuerzo para aprender la relación entre el
alfabeto y los sonidos y la maestra valora su
tenacidad y el despertar de una considera-
ble inteligencia. Del aprendizaje de la lectura
pasan al mundo de la literatura y es en ese
momento cuando la novela cobra una
fuerza extraordinaria al poner de manifiesto
el enriquecimiento personal que la lectura
de calidad supone para cualquier persona.
Las conversaciones entre profesora y
alumna alcanzan un nivel de intimidad muy
elevado al sentirse unidas por el amor a los
clásicos. Entre la basura del vertedero
aparecen libros que les resultan muy útiles y
la profesora le presta algunos suyos, que ha
conservado desde los tiempos
en que daba clase en la
universidad antes de que los
jemeres rojos destrozaran todo
lo que daba sentido a su
existencia. Literatura, política,
amistad, enfermedad, generosi-
dad, esperanza y amor forman
el trasfondo en que se enmarca
esta bella ficción narrativa,
inspirada lejanamente en
hechos y lugares reales. El autor
ha sabido perfilar unos persona-
jes muy humanos en sus
ilusiones y sus penas y enviar a
sus lectores un mensaje donde
se pone de manifiesto con toda
claridad que saber descifrar un
texto escrito es sólo el comienzo
de algo que puede cambiar sus
vidas por medio de los libros si
alguien les enseña cómo hacerlo
igual que lo hace la cobradora
de alquileres con la protagonista.
Un lugar
para la
esperanza
Camron Wright
Camron Wright lleva a las páginas de la novela la
vida de unas personas reales que golpean y, al
mismo tiempo, reconfortan las conciencias de
quienes la leen.
Palabra
368 págs.
19,00 €
U
na historia de superación, amor y sacrificio, en un
entorno tan hostil como un vertedero de Camboya.
SL
LIBRO DESTACADO
8 FUNDACIÓN
TROA